[Eriol T. Harlaown] À bientôt Sailor Moon Crystal: Una reflexión

Y hay varios aspectos que permiten corroborar este hecho, principalmente en la forma en cómo se cuenta la historia, y eso es lo que por lo menos tanto los fans como yo mismo exigíamos de un estudio que en los últimos años se ha caracterizado por un bajo nivel en su animación. Algo que se ve reflejado en la forma en donde Toei pone a su disposición sus trabajos en el ámbito: Haciendo uso de una subcontratación de animadores en subsidiarias de países como Filipinas.

Pero hasta hace algunos meses algo logró avizorarse diferente. El arco que confrontó a las Sailor Guerreras contra una pandilla exiliada del futuro reino del Tokyo de Cristal nos ofreció una historia más limpia, emotiva y conquistadora. Y aquí detallo mi última visión acerca de Sailor Moon Crystal, la nueva historia de una de las series más influyentes y exitosas del mundo de la animación japonesa.

La historia: Un cambio necesario

Una de las cosas de las que cuestioné en mi pasada columna acerca de la serie fue el como la historia del manga se contaba en el animé. En varios pasajes, principalmente en el final del anterior arco del “Reino Oscuro” se apreciaba una excesiva aceleración por contar la historia de acuerdo al capítulo. Algo que llevó a que en muchos pasajes de la historia, esta perdiera la carga emocional que caracteriza tanto la historia del manga como en la versión clásica de 1992, diferentes en sus historias, pero con la mencionada carga emotiva que las caracterizan.

Hoy podemos ver que ese aspecto se ha mejorado notablemente en el arco de “Black Moon”. Si bien la serie en algunos pasajes se hacía predecible, con el transcurso de la historia esta se mostró mucho más controlada, con tiempos que permitieron una mejor comprensión del desarrollo de parte del espectador. Algo que desde mi punto de vista valoro principalmente producto que disfruté muchísimo más esta historia que la anterior.

El factor Chibiusa

Muchas veces sucede que cuando aparecen personajes “nuevos” dentro de una historia, siempre te preguntas cual será tu grado de empatía con ese personaje, desde que la conoces hasta que vez su proceder en cada uno de los episodios de tu serie favorita. Y no es lo de menos, la pequeña Chibiusa tiene mucho que contar al respecto. La niña que vino del futuro en esta nueva serie consiguió algo de lo cual se veía muy distante en la serie de los noventa: Conquistar los corazones del televidente desde su primera aparición.

Digámoslo con todas sus letras, Rini como la conocimos acá en la segunda temporada de la serie fue un personaje que en un principio despertó todos tipo de anticuerpos. Sentimientos muchas veces negativos que van desde la apatía hasta incluso el odio. Y las razones no son menores, producto que a ella se le cargó gran parte de la responsabilidad del quiebre amoroso entre Usagi y Mamoru. Para algunos fans, la balanza de la simpatía se volcó rápidamente hacia una Sailor Moon que sufría a fuego vivo cada día de su quiebre, muy al contrario de Rini quien capitalizó todos los odios de la fanaticada.

Sin embargo ello no ocurre en la nueva serie. La vemos mucho más honesta, más sincera, más inofensiva y buscando una protección que logra encontrar tanto en Sailor Moon como en Tuxedo Mask.

Otro aspecto importante de la “Pequeña Dama” como la conocimos acá es su rol en la serie. Es mucho más protagónica, más cooperativa en la historia y desde un principio se muestra cuál es su objetivo al viajar al pasado. No la vemos con los secretismos y rodeos  propios de una temporada larga como se vio hace 22 años atrás, aunque hay que valorar que hubo en ese momento algunos aspectos cautivadores propios de una serie de acción. Sin embargo lo que vimos hoy respecto a la hija de Usagi y Mamoru en esta nueva entrega es mucho mejor en todos los aspectos: Es mucho más querida a los ojos del espectador.

Sailor Pluto: Una Femme Fatalle heroína

Otro de los puntos altos para mí en esta nueva serie es el rol de Sailor Pluto, la cual pasó de un papel corto respecto a la misma saga hace 22 años, a uno completamente protagónico e incluso decisivo en la saga.

En primer lugar, podemos destacar algo que resulta evidente para cualquiera que haya visto ambas series, y es que la guardiana del tiempo es un ser no tan frio como la conocimos en la primera serie. Así es, ¡Sailor Pluto es una persona con sentimientos al fin y al cabo! Sin embargo, esos sentimientos podrían no ser muy bien mirados de parte de los fans de la relación entre los dos soberanos del reino del futuro, algo de lo cual profundizare un poco más adelante.

En segundo lugar, podemos observar un personaje que reviste de mayor vida, belleza y sensualidad. No por algo es uno de los objetos de admiración de la pequeña Chibiusa en medio de la crisis que vive el Tokyo de Cristal en el futuro. Y si bien es algo que no es nuevo, producto que ese sentimiento de Chibiusa se expresa en la segunda temporada de la serie, en esta nueva entrega ello es algo que se profundiza y ello se demuestra en los albores del arco. 

Por último, y haciendo una conjunción entre los dos puntos anteriores, podemos destacar el gran protagonismo de Sailor Pluto en el mencionado arco, y ello es resultado de los dos puntos vistos anteriormente: Primero, Sailor Pluto es un personaje que demuestra ciertos sentimientos al Rey Endymion del futuro. No pocos de los fans especularon que ambos podrían ser una especie de “amantes” dentro de la serie y no es lo de menos, Setsuna como personaje siempre sido del atractivo de un segmento de los fans de la serie. Sin embargo, no podemos condenar a nuestra guardiana del tiempo por el hecho de mostrar sus sentimientos hacia el Rey de Tokyo del Cristal, total es algo que nace con toda naturalidad desde las emociones de cualquier ser humano, quizás en ese pequeño aspecto podría ganarse el título de femme fatale, más allá que su significado sea muy diferente al de su proceder en la serie. Al fin y al cabo, quien esté libre de ese pecado que lance la primera piedra.

Por último, y con relación al segundo punto mostrado anteriormente, Sailor Pluto llega a adquirir un protagonismo incluso decisivo al final de esta saga, y tanto es así que su acto final llega a conmover por el hecho de usar un arte prohibido con el fin de evitar una hecatombe mayor. De por sí, su sacrificio es algo que no solo logra salvar a la tierra, sino también despertar a Chibiusa de ese sensual letargo oscuro que conocemos como “Black Lady”. De ahí en adelante es todo un desborde de emociones que permite generar un contacto entre el personaje y el telespectador. 

Otros detalles de la serie

Los Villanos: .Quizás el punto más bajo dentro de la serie es el papel de los villanos. Y es que era del todo esperable el corto papel que tendrían en la serie las Hermanas Koan, Berthier, Calaveras y Petz, dado su papel en el manga. De hecho, son solo un enemigo más dentro de esta serie respecto a la versión de 1993 donde eran villanas de rango más elevado, y cuyo final es muy diferente.

Respecto los cuatro cabecillas “Black Moon” (Rubeus, Emeraude, Saphir y Deamand) tampoco sorprenden sus finales, casi como si fueran otro enemigo más dentro de la serie. La excepción a esta regla es Deamand quien tendría un papel más activo y dramático ya en los albores de la serie.

Respecto a Weissman, mi impresión es ver a un “sabio” mucho más malévolo, sádico y siniestro. Además esta historia se encarga de profundizar los motivos que le llevaron a tener un profundo resentimiento hacia el reino de Neo Queen Serenity. 

Las Sailor Senshi: Tal vez el saber sobre el destino en cada episodio de las Sailor Guerreras, con excepción de Sailor Venus, fue un factor que quitó algo de protagonismo a cada una de ellas. Aunque hay que reconocer que en cada episodio hubo un espacio dedicado a conocer la “otra cara” de cada una de las guerreras. Por ejemplo, en la primera serie nunca conocimos como era la vida escolar de Rei dentro de su instituto y principalmente su relación con Kotono, una de sus compañeras de clases que dice sentir una confesa admiración por ella. También, se expone una extraña relación entre Makoto e Ittou Asanuma, un muchacho que dice admirar a Mamoru. La historia de Ami con el ajedrez era algo conocido por muchos, con la sola modificación del sorpresivo final del episodio.

Sin embargo, cabe destacar el amplio rol que abarca Minako dentro de la serie. Mucho más protagónico y cumpliendo su labor como líder de las cuatro Sailor Senshi. 

Mamoru: Si hiciéramos una comparación con el Mamoru de los 90 (Darien como lo conocimos), este se comporta mucho más "humano” y ello se demuestra en que esa falsa crueldad que le vimos con Usagi en la primera serie casi se borra acá. Otro elemento “sorprendente” del personaje, es su nuevo poder con el cual hace frente a los enemigos, aunque siento que ese aspecto se podría haber animado de otra manera, al igual que el poder de Usagi con el “Halo de la Princesa”.

Usagi: Dejo para el final a la principal estrella de este show, muchas veces víctima de la mala animación de la cual fue víctima en la primera serie (Quizás no tanto como lo que le sucedió a Rei en el tercer episodio xD). Se le puede ver mucho más decidida al combate y más aun teniendo como motivo el bienestar de su hija del futuro. En ese aspecto Sailor Moon en esta serie no desentona, y quizás, su voluntad en la lucha es mayor en esta serie que en la versión anterior.

¿Cuál será el destino de Sailor Moon Crystal?

Mucho se puede conversar respecto a cuál será el destino de la serie, y más aún dentro del fandom: si la serie debiese continuar. Este tema puede dar para un debate largo y extendido dado lo accidentado que ha sido la exhibición de la serie durante un año. Conversaciones al respecto se han dado principalmente por la calidad de animación que hace uso Toei Animacitn, empleando mano de obra de sus subsidiarias en Filipinas e India y que tuvo su punto más álgido hace poco con la exhibición del episodio número cinco de Dragon Ball Super, en donde se mostraron en evidencia la gran cantidad de fallas en la animación, las cuales fueron el punto de crítica principal tanto en la obra de Akira Toriyama como en la que hemos hecho análisis ahora.

La cuestión es ¿Debe Toei seguir con la serie? La respuesta es obvia: Si. En primer lugar, no sería visto de muy buenos ojos el hecho que el estudio renuncie a la producción de la serie, ya que sería algo muy mal mirado tanto para el staff, los ejecutivos y los patrocinantes de dicha serie que es vista en televisión. Hay compromisos de por medio, presupuestos y la fallas en la animación no pueden por supuesto subestimarse. Muchas veces se ha puesto a prueba la capacidad de retroalimentación del estudio y ha demostrado con lo ya descrito no pasarla.

Por último, ello podría desatar conflictos con la autora, lo que podría llevar a que Naoko Takeuchi detenga el proceder de la franquicia en todas sus formas. Desde luego los fans no querrán que su serie favorita quede nuevamente suspendida por diez años más.

En fin, mucho ha ocurrido desde que la serie se estrenó en Agosto del año pasado. Una sensación emocionante que derivó el episodio uno de la serie y fue trascurriendo cual tempestad en cada capítulo. Si bien la calificación de los fans hacia Sailor Moon Crystal es en general buena (un 21.8% la calificó con nota 7/10 y un 17.5% la calificó con nota 8/10), esto nos lleve a que el poder lunar pueda manifestarse en unos meses más, con la compañía de las deidades del cielo, los mares y la destrucción. Ojalá los próximos 26 episodios, si llegan a ser animados, puedan brindarnos lo mejor de los corazones puros de estas Sailor Guerreras, que por siempre habitarán en los espejos de nuestros sueños y que sembrarán semillas estelares en cada nueva generación que vea tanto esta como la serie clásica que conocimos.

À bientôt (hasta pronto) Sailor Senshis.