[Reseña] Onimusha 2: Samurai's Destiny Remaster: Port moderno, que es de PS2, y se siente como PS1
Lanzado originalmente en 2002 para PlayStation 2, Onimusha 2: Samurai’s Destiny fungía como secuela de una fórmula que mezclaba samuráis, acción y elementos de fantasía sobrenaturales con los diseñadores de Capcom de por medio.
Más de 20 años después, se lanza una versión remasterizada que actualiza su aspecto visual y técnico, además de novedades sutiles como una inesperada localización en español latino, cosa que en ANMTVLA siempre será de aplaudirse, puesto que adapta y revitaliza la experiencia para una nueva generación de jugadores en todas partes del mundo, pero singularmente en nuestra región.
Más allá de la nostalgia, este regreso tiene la prueba de ver qué tan bien resiste el paso del tiempo, qué tan completa es esta remasterización, y por qué Onimusha 2 es -a los ojos de Capcom- un título digno de redescubrir.
¿QUÉ TAL LA LOCALIZACIÓN?
Aunque Onimusha 2 nunca contó con una traducción oficial al
español en su lanzamiento original, este Remaster finalmente introduce una
localización completa (textos y subtítulos) al español latino. Eso sí,
únicamente con doblaje en inglés y japonés.
Lo mejor: está muy bien hecha, respeta el tono
dramático y épico de la historia, no se siente robótica y no se pierde entre lo
complicado que puede ser respetar en nuestro idioma las diversas personalidades
e interacciones del cast.
Los diálogos fluyen con naturalidad, si bien no son abundantes, están correctamente escritos y se nota un esfuerzo genuino por hacer la experiencia más accesible y disfrutable para la región. En una época donde este tipo de desarrollos suelen tener traducciones hechas a la carrera, este trabajo destaca por su cuidado. Es una forma renovada que se agradece profundamente.
ESTÉTICA Y AMBIENTE DEL JAPÓN FEUDAL
Desde la pantalla de título, el juego deja claro que su alma está profundamente arraigada en el Japón feudal; los escenarios prerenderizados están ahora remasterizados en alta definición y conservan ese aire de tierra nipona viva. Hay aldeas, templos, castillos, cuevas y diversos entornos que evocan un mundo bien logrado en transmitir belleza e incertidumbre.
El diseño de arte está cargado de referencias históricas y detalles místicos. Es un equilibrio particular con estética uniforme gracias al diseño de personajes tales como criaturas o monstruos que, dentro de su curiosa combinación, se sienten uniformes.
La música complementa a esta vibra de forma muy precisa. Son melodías tradicionales con instrumentos japoneses que ahora están en arreglos orquestales que son inmersivos, a veces de forma melancólica, de terror o emocionante, resultando en una ambientación muy bien lograda.
COMBATE ESTRATÉGICO Y DE ACCIÓN
El sistema de combate en Onimusha 2 es una mezcla entre acción y estrategia que recompensa más a la precisión y el timing que dar botonazos a lo loco. Jubei, el protagonista, cuenta con una variedad de armas cuerpo a cuerpo y a distancia, como katanas, lanzas, arcos y demás, cada una con su propio estilo y ventajas.
Una de las mecánicas centrales es un contraataque crítico que se activa al atacar justo en el momento exacto en que un enemigo nos golpea; lo elimina al instante y puede encadenarse para ir cuál samurái, haciendo corte preciso tras corte preciso.
Jubei también puede absorber almas de enemigos derrotados,
diferenciadas por colores; Rojas para mejorar armas y armaduras; azules
para recargar la barra de magia que nos permitiría lanzar ataques mágicos con
las armas; las amarillas que restauran salud y orbes morados que
al recolectar cinco, puedes convertirte temporalmente en “Onimusha” (Sí,
el nombre del título), aumentando su poder de ataque y volviéndose casi
invencible.
Además, cada arma posee técnicas especiales que se ejecutan con combinaciones específicas, como presionar abajo, arriba y ataque cuerpo a cuerpo, lo que añade profundidad al sistema de combate. Es un combate con acción intensa y elementos estratégicos: clásico, desafiante y con una sazón diferente al del hack and slash convencional.
CÁMARA FIJA Y CONTROLES: ENTRE NOSTALGIA E INCOMODIDAD
Una de las señas que delatan que es un juego de Capcom es su sistema de cámara fija, heredado directamente de la era del primer PlayStation, especialmente en títulos reconocidos como Resident Evil. Cada habitación o sección tiene su propio ángulo predeterminado, no puedes mover la cámara. Por un lado, tiene una composición visual muy cuidada y hasta cinematográfica. Su dirección de arte se apoya en los encuadres para transmitir lo que el juego desea.
Pero por el otro, también tiene sus contras, en combates
rápidos o al cambiar constantemente de pantallas es fácil perder el sentido
de perspectiva y no saber hacia donde te mueves entre constantes cambios,
esto puede ser frustrante; a veces cuesta ubicar a los enemigos o
predecir si hay algo fuera de cuadro. Además, naturalmente, el juego tiene
controles rígidos, propio de los juegos de su época.
El juego es caprichoso, requiere su práctica, para que poco a poco se le adopten y se sienta que cumplen con su cometido: favorecer a la experiencia de juego.
UNA HISTORIA DE VENGANZA, ALIANZAS Y DEMONIOS
La narrativa en esta ocasión tiene diversos arcos con múltiples personajes secundarios. El protagonista, Jubei Yagyu, es un samurái que regresa a su aldea solo para encontrarla destruida por los Genma, demonios que conspiran en las sombras del Japón antiguo. A partir de ahí, su misión de venganza lo lleva a enfrentar una amenaza que trasciende lo personal y se adentra en una lucha por algo más allá que su propia vida.
Se introduce un sistema de relaciones simple con
otros personajes a los que puedes regalarles objetos o interactuar con ello y,
dependiendo de que lazos formes, verás distintas escenas y aparecerán a futuro.
Esto le añade una capa extra a la historia que ya tiene sus elementos
interesantes.
La narrativa acata la filosofía general del juego de combinar
elementos históricos con sobrenaturales, fusiona la figura del samurái con
demonología. Para muchos, puede parecer simple, pero conseguir esta coherencia
y naturalidad tiene su mérito.
No es un guion complejo ni particularmente profundo, pero tiene carisma, momentos memorables y una estructura que se siente dinámica y hasta ambiciosa para el estándar de su época.
CONCLUSIONES
Onimusha 2: Samurai’s Destiny Remaster no busca
reescribir ni reestructurarse, sino preservar lo que tanto gustó e hizo memorable
al original. Con su ambientación cuidada, combate caprichoso y desafiante, así
como una narrativa sobresaliente del estándar en 2002.
Su cámara fija y controles clásicos chocan con las sensibilidades modernas, pueden volverse parte del carácter y encanto, según el tipo de jugador. Y a lo largo de unas siete horas de campaña que son rejugables en cierta medida, la experiencia se agradece y se valora el esfuerzo reflejado en gráficos y adaptaciones para que este juego quede inmortalizado en las plataformas que está disponible: PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X|S, PC y Nintendo Switch.
Vale la pena mencionar que algunos usuarios han criticado
ciertos cambios del remaster, como leves censuras visuales o alteraciones en
texturas, lo que ha generado debate entre puristas y jugadores nuevos. Sin
embargo, nada de esto afecta de forma significativa la experiencia general.
Definitivamente, no es para todos, pero quienes buscan una experiencia clásica de samurái con identidad propia, Onimusha 2 sigue teniendo valor digno de descubrirse. Esto le hace acreedor de una calificación de 75/100 en ANMTVLA.
Reseña realizada por Hugo Montiel, para más contenido e interacción sobre el mundo de los videojuegos, anime, manga y televisión todos los días, puedes checar mis redes