[Eriol T. Harlaown] Disney XD: Xtreme Disaster
Por
Roque A. Espinoza Bravo
el
17.12.14
“Lo bello es siempre raro. Lo que no es ligeramente deforme, presenta
un aspecto inservible.” Charles Baudelaire.
Un “poeta maldito” rezó esta
frase respecto a aquello inútil, o inservible. Pero el tema de nuestra columna
deja la frase anterior muy pequeña, ya que no existe una palabra que pueda
describir a la entidad la cual dedico la columna de este mes.
Y no existen palabras para
describir a este objeto horrible nacido en 2009. Una transformación de algo productivo
hace 15 años atrás, a un objeto cuya única existencia es decorar la pantalla,
sin prestar utilidad.
Imagine: Cuando usted sintoniza Disney XD. ¿Sabía usted que la misma
señal, con otro dueño, emitió series como Patlabor,
Medabots, Supercerdita, Shaman King
y Digimon, además de otras series
como Ángela Anaconda, Dientes de Lata, Totally Spies, Sonic X
entre otras animaciones? ¿Sabía que también realizaba una actividad dedicada al
sano esparcimiento como una Copa de Futbol para niños? Ahora lo invito a sintonizar el
canal: ¿Con que se encuentra?
Un Canal Autocopiado
Siempre va a ser complejo hablar
de la palabra “Disney”, principalmente a través de la serie de especulaciones y
misterios que rondan la figura de su fundador. Sin embargo, hemos sido testigos
del crecimiento que ha experimentado la marca en los últimos años, dados
principalmente en su participación dentro del mercado de la televisión por
cable, en donde hasta hace quince años solamente existía una sola señal, para
encontrarnos hoy con tres canales distintos, enfocados a “públicos distintos”.
Pero no todo lo que ofrece Disney
en nuestro continente puede considerarse como “leche y miel”. Hoy nos podemos
encontrar con una serie de contradicciones de acuerdo a la propuesta que ofrece
la compañía en el continente y con respecto a eso existe un protagonista que
hace cinco años atrás penetró el mercado televisivo tanto del continente como
del mundo, prometiendo “Llegar al máximo nivel” en nuestros televisores. Y es
que si tuviéramos que sintetizar la imagen de Disney XD en nuestro continente,
sería calificar a este canal de televisión como “Una Copia de si mismo”.
Y esto último salta a la vista
cuando colocas una o dos horas de su programación: Nada que ver a la propuesta
inicial planteada en 2009. Solo nos encontramos con una señal dos de Disney Channel en Latinoamérica
destinada al reciclaje de sus series animadas exhibidas en su canal hermano,
hoy en día transformado en un sitio para live
actions.
Pero: ¿Dónde está lo innovador?
¿Dónde está lo “EXTREMO”? (Risas por favor).
Si observan el video promocional
del canal una vez clausurada la etapa Jetix,
caracterizada en sus últimos momentos por una sobreexplotación exagerada de
series como Pucca y los Padrinos Mágicos, nos encontramos con
una propuesta que tenía como eje la serie Aaron
Stone, pero que al año terminó siendo cancelada. Lo mismo se puede decir de
algunas franquicias derivadas de Saban como Power Rangers las cuales terminaron deambulando en canales de la
competencia. Desde ese momento el canal pasó a convertirse en una especie de
papelera de reciclaje de Disney Channel y es cuando te das cuenta cuando no
existe reparación alguna. De no ser por Gravity
Falls y las continuas reiteraciones de Phineas
y Ferb, Kick Buttowsky y la
expansión de la marca a nivel mundial, la señal hubiese cerrado hace varios
años por lo menos en este lado del charco.
Un retroceso de ideas
Fundado en 1990, FOX Kids fue uno de los pioneros en
programación infantil en los Estados Unidos, de la mano de News Corporation, Saban
Entertaiment y Fox Broadcasting
Company. Sin duda alguna, su fundadora Margaret Loesch creó una alternativa
clara y depurada que en Latinoamérica se tradujo en una infinidad de espacios:
Desde series animadas de la factoría Saban y DIC Entertaiment, live actions con guiones dinámicos,
bloques definidos como “Mysteria” (Orientado al suspenso), “Invasión Anime”
(con series inolvidables mencionadas al principio de esta columna) e “Insomnio”,
con series que encantaron al público que fue niño en la década de los sesenta
como El Llanero Solitario, Los Tres Chiflados, Batman (Protagonizada por Adam
West) y La Familia Adams entre otros clásicos.
Pero de a poco estas ideas se
fueron yendo para adoptar una filosofía basada en lo facilista, y esto es
tangible ver en la desaparición de la Copa Fox Kids en 2010 (La que hasta ese
momento llevó el nombre de Copa Disney XD) la cual desde 1996 (!) sirvió como
instancia de fomento a las actividades al aire libre y a la recreación.
Con esto último podemos apreciar
claramente la intención del consorcio sobre la señal: convertirla en un canal más
del montón y de un modo muy bien logrado. Un sitio donde cabe el sedentarismo
televisivo por encima de una creatividad que no existe y en donde el facilismo
propio de la programación le permite sustentar índices de audiencia colgándose de
tres o cuatro shows. Estrategia palpable en su canal hermano Disney Channel
donde un solo live action (A saber: Violetta) es lo que sostiene su éxito.
Si hoy tuviéramos que comparar a Disney hoy con algún canal de mi país, sería
el actual MEGA de Patricio Hernández,
cuyo canal hoy en día sostiene su éxito solo a base de teleseries turcas.
2009: El año del desastre televisivo
Tal parece que el 2009 fue el año
de la consolidación del desastre programático en todos los consorcios
televisivos. Y es que junto con la aparición de Disney XD, otros proyectos
televisivos que enfrentaron cambios en nuestro continente terminaron
convertidos en algo peor o fueron reemplazados por canales de televisión que fácilmente
entran en la definición de la frase dada al principio de esta columna.
Tal caso es el canal TruTV de Turner, quien llego a DirecTV en reemplazo del inolvidable
canal Retro. Cuando todos los que
somos abonados esperábamos la aparición de Tooncast,
tal como lo había sido informado en su momento, surgió este visitante
indeseable a la parrilla de dicho sistema satelital. Un canal que en su momento
se dedicó a sobreexplotar el reality
policial “COPS” difundido hacía varios años en señal abierta y cuyo formato hoy
es copiado por Chilevision aquí.
Hasta el día de hoy todavía espero respuesta del reclamo a mi operador por
semejante insulto programático.
Pero también otra cosa que se
destaca de ese año fue el giro conservador que dieron algunas otras señales
televisivas en su programación. Por ese mismo año Cartoon Network comenzaba a erradicar toda la programación animé
que ofrecía y daba inicio a la mudanza de Adult
Swim al canal i-Sat donde el
bloque terminaría muriendo. Y desde luego, 2009 fue también el año del cambio
irreversible de Animax que
finalmente lo llevó a morir este año que termina y del modo más decadente.
Podemos seguir sumando casos,
pero quedémonos con los que quizás son los más ejemplarizadores de esta suerte
de decay que viven hoy las
corporaciones televisivas. ¿Por qué no existe una suerte de castigo de parte de
las audiencias a estos canales?
Quizás la razón principal es que
estos últimos han servido de alternativa a las concesionarias de televisión
abierta las cuales en los últimos años han estado viviendo (o mejor dicho “sobreviviendo”)
dentro del mercado. Estos últimos se han quedado sin ideas en lo que respecta a
entretenimiento, salvo algunas excepciones, lo que ha sido cubierto en parte
por la televisión paga.
Tal vez Disney XD continúe en al
aire con una audiencia aceptable para los parámetros Disney, el cual tiene
todos los recursos disponibles para mantener la señal, aún sin dar nada
considerado como “bueno” de parte de un segmento de televidentes que ven este
canal como una suerte de relleno dentro del espectro televisivo, dentro de los
cuales me incluyo. Y más allá que hoy esta señal se esté caracterizando por ser
un “Robo a mano armada” contra el suscriptor que paga mes a mes el cada vez
menos diverso entretenimiento que ofrecen las cableras, hemos visto también en
auge otros medios de entretenimiento que han servido de alternativa
(Principalmente Nexflix) pero que se encuentran condicionado al ancho de banda
de los usuarios. Tal vez una vez masificado esto último, el consumidor de
entretenimiento tenga una gran oportunidad de propinar el punch necesario a las televisoras como castigo a su pobre enfoque al
consumidor final. ¿Cuánto tiempo tendremos que esperar para ello? Solo pido que
sea lo más pronto posible.
Nos vemos en otra ocasión.