[Reseña] Párvulos - Hijos del Apocalipsis: Un relato de supervivencia entre zombies y lazos familiares

Por el 7.11.24

Si no hubiera escapatoria en un mundo post apocalíptico, ¿te adaptas o sigues corriendo? Esa respuesta nos contesta Párvulos, Hijos del apocalipsis, una historia mexicana escrita y dirigida por Issac Ezban, estelarizada por Mateo Ortega Casillas, Leonardo Cervantes, Farid Escalante Correa y Carla Adell. La película es distribuida por Corazón Films.


¿De que trata?

Párvulos: Hijos del Apocalipsis nos sumerge en un inquietante mundo post-apocalíptico, donde Oliver, Benjamín y Salvador, tres hermanos sobrevivientes del devastador virus Omega, se enfrentan a un entorno hostil. Aislados en una cabaña en medio del bosque, han aprendido a cazar y cultivar gracias a las enseñanzas y protección de sus padres, quienes desaparecieron durante el caos que se desató.


La historia se desarrolla en un ambiente de constante amenaza, donde no solo deben protegerse de los zombies, además de un grupo conocido como los despiadados Trompetas, que anuncian su llegada resonando a la distancia, sino también del monstruo que habita en su sótano, un símbolo del terror que acecha en la oscuridad. A medida que la tensión crece, la pregunta resuena: ¿estás con ellos o estás de sobra?.



Crítica

La trama del filme presenta una propuesta novedosa en el cine mexicano moderno, ya que generalmente los zombies en México no son retratados como una amenaza real, lo cual contrasta notablemente con las tendencias actuales. A diferencia de Ladronas de almas (2015), escrita por Cristopher Luna, donde los zombies son creados a través de la voluntad de un tercero para proteger las tierras, en esta película la propagación del virus es resultado de una vacuna defectuosa. De este modo, la narrativa se mantiene alineada con la ola de interés por los zombies que surgió en la década de 2010, impulsada en parte por los cómics The Walking Dead de Robert Kirkman y Tony Moore.

 

El uso constante de colores en blanco y negro, junto con tonos mate en café y acentuados en colores primarios, crea una sensación de soledad y desesperanza a lo largo de la trama. Dado que el 80% de la película transcurre dentro de una cabaña, la ausencia de personajes adicionales refuerza esta atmósfera, centrándose únicamente en los tres hermanos.

 

La película se divide en tres actos. En ellos vamos viendo la vida de los jóvenes protagonistas y su forma de vida en una cabaña aislada, donde las dinámicas familiares son evidentes. La paciencia del mayor, Salvador, se pone a prueba constantemente por las travesuras de sus hermanos, Oliver y Benjamín. A pesar de su condición (sin una pierna), Salvador se esfuerza por mantener la protección y la unión familiar.



A medida que avanza la historia, Benjamín, el más pequeño, descubre el oscuro secreto del monstruo que habita en el sótano. Mientras la llegada de un nuevo personaje, Carla, añade un nuevo elemento a la trama, cautivando a Salvador con su encanto. Sin embargo, el ritmo de la película decae en ciertos momentos, especialmente en esta parte. A pesar de la introducción de nuevos personajes, que podrían haber aliviado la tensión, la narrativa se siente interminable y poco fluida.

 

La tensión aumenta con la aparición de los Trompetas, un grupo que parece actuar impulsado por creencias religiosas. El líder de este grupo, que habla con citas bíblicas, da la impresión de estar drogado, mientras que sus secuaces parecen ser bastante torpes. Esta mezcla de elementos genera una sensación de confusión y desconcierto en el clímax de la historia.

 

Para rematar el final de la película, se siente ni satisfactorio, ni decepcionante, pero como diría MargeEs un final y punto.


Las actuaciones

  • Mateo Ortega (Benjamín): Es el más pequeño de los hermanos, lleno de dudas sobre el mundo que lo rodea. Su carácter a veces molesto es contrarrestado por un lado dulce y vulnerable. Mateo aporta a Benjamín la complejidad necesaria para mostrar sus diversas facetas y transformaciones a lo largo de la historia.
  • Leonardo Cervantes (Oliver): Como el hermano del medio, Oliver se presenta como el más sensato y, al mismo tiempo, el más asustadizo. Es el personaje que piensa dos veces antes de actuar, lo que añade profundidad a su desarrollo. Leonardo aporta matices que sugieren que Oliver ha tenido que madurar más rápidamente que sus hermanos, a medida que se enfrenta a la dura realidad en la que vive.
  • Farid Escalante (Salvador): La actuación de Farid es notable; su habilidad para manejar tanto una bayoneta como muletas es impresionante, lo que demuestra un gran compromiso con su papel. Sin embargo, en ocasiones su volumen de voz hace que sus diálogos se pierdan, y también comete errores en algunas líneas. A pesar de esto, su esfuerzo por hacer su interpretación lo más precisa y creíble posible es evidente.



Conclusión

Si bien no es la película de zombies definitiva, Párvulos: Hijos del Apocalipsis presenta aspectos interesantes que destacan, como su enfoque en la supervivencia y los lazos familiares, además de que logra deslindarse del acostumbrado estilo de Estados Unidos.


Esta cinta ofrece una intensa mezcla de horror y drama, lo que la convierte en una opción perfecta para disfrutar en cines durante la temporada de espantos y brujas. La atmósfera inquietante y las actuaciones de los jóvenes protagonistas son realmente admirables y contribuyen a una experiencia cinematográfica memorable.

 

Distribuido por Corazón Films, Párvulos, Hijos del apocalipsis está disponible desde el 7 de noviembre en México, donde cabe mencionar, cuenta con 2 versiones: una calificación B y otra C, siendo una buena opción para una noche de terror.

 

*Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no reflejan necesariamente la posición de ANMTV.